3.11.1: Ilustraciones: Guernica (Pablo Picasso, 1881-1973)

Guernica se basa en los eventos del 26 de abril de 1937, cuando la poderosa fuerza aérea alemana de Hitler, que combatía con la aviación legionaria italiana en favor de los nacionales, bombardeó la aldea de Guernica en el norte de España, una ciudad sin valor militar estratégico.  Fue el primer bombardeo en alfombra con el objetivo de destruir una ciudad. Fue un ataque bien simbólico también contra el alma de la nación vasca, donde reside el árbol de Guernica-símbolo primero de las libertades tradicionales de los vascos y después de la soberanía vasca. Se ideó la misión para probar una nueva táctica de bombardeo para aterrorizar e intimidar a la resistencia. La estrategia buscaba romper la voluntad del enemigo de luchar asegurando que una población civil temerosa ejerza presión sobre sus representantes militares y políticos para detener la guerra y rendirse. Durante un día de mercado habitual, empezando a las 4:30 de la tarde y terminando 3 horas después, más de veinte bombarderos arrojaron más de 100,000 libras de bombas explosivas e incendiarias sobre la población civil, matando a cientos y reduciendo la aldea a escombros. La devastación fue espantosa: Se estima que un tercio de la población, o sea 1700 civiles, resultaron heridos o muertos. Los incendios ardieron durante tres días y tres cuartas partes de la ciudad fueron destruidos.  Los hechos de esta atrocidad fueron reportados por todo el mundo el día después, convirtiendo este episodio en un símbolo del horror de la guerra.

Picasso estaba trabajando, con pocas ganas, en un mural grande para el Pabellón de la República Española para la Exposición Internacional de Paris de 1937, cuando leyó las noticias sobre este bombardeo.  Se puede repasar el mismo relato de un testigo ocular (por George Steer) que probablemente leyó Picasso en aquel momento. Cinco días después del bombardeo, Picasso abandonaría su idea inicial para el mural y realizaría los primeros esbozos de su famoso cuadro.

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Unos años más tarde, los nazis ocuparon Francia poco después de comenzar la segunda guerra mundial.  Muchos artistas buscaron refugio en otros países, pero Picasso se quedó en París. Frecuentemente era acosado por la Gestapo. Se cuenta que, una vez, cuando un oficial nazi asaltó su piso vio una fotografía de Guernica y preguntó a Picasso si lo había hecho él. “No,” respondió el artista, “ustedes lo hicieron.”